Hoy es un día gris.
Ha amanecido lloviendo, hace frío.
Todo esto es superable; las estaciones terminan por llegar antes o después.
Pero lo que realmente hace gris este día es que mi chica, después de años, se ha decidido a sacarse el carnet de conducir.
Esta mañana me ha dicho que ha tenido un sueño, que iba conduciendo, que por algún motivo le perseguía la policía y que los frenos no funcionaban.
Ante una situación angustiosa, normalmente me dice que ha tenido una pesadilla. En este caso me ha dicho que ha tenido un sueño. Toda una declaración de intenciones.
Bolardos del mundo, temblad.
La palabra apropiada no es miedo. La palabra exacta es pánico.
Tanto tiempo libre para perderlo uniendo palabras y escribir chorradas es, cuanto menos, inmoral. Y para dedicarlo a leerlas, ni te cuento. De vez en cuando me obligaré a escribir algo y tú te obligarás a leerlo de cuando en vez. Si algo te divierte me invitarás a una cerveza por los servicios prestados, si algo hurga en tu conciencia hasta doler, te invitaré yo. No es trato injusto si evito que tengas que ir al loquero o que pienses que esta vida quizás tenga solución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario