... porque ya me diréis si tener coche con los tiempos que andan no es temerario.
Yo tengo mi ideal de coche, el deportivo rojo del caballito. Cuando se lo comenté a mi mujer para
mi sorpresa me dijo: "vale, sin problema".
Llegados a este punto, convine recordar las entradas de diccionario mujer - castellano para no
andar despistado.
Pero en este caso, para aumentar mi sorpresa, estaba hablando en serio, no con segundas ni
terceras intenciones, como por otro lado es habitual.
Es una pasta, pero un Ferrari lo merece.
Estaba tomando medidas en el garaje para ver que entra bien, cuando vino mi mujer toda
emocionada.
"He encontrado uno de esos coches que te gusta tanto (y mira que me ha costado), y el precio
está muy bien. Lo único es que hay que ir a recogerlo".
"¿A recogerlo? No, mejor no pregunto".
Me extendió unos papeles que traía en la mano, unos correos electrónicos vendedor y unas fotos
del vehículo.
Sin comentarios.
Ir a recogerlo ... ¿dónde? Si hasta las letras de la matrícula están al revés. ¿En qué país de este
bendito planeta utilizan ese alfabeto?
Y ahí seguía Isabel delante de mí, con una sonrisa mezcla de emoción y satisfacción por el trabajo
bien hecho de oreja a oreja.
No, no era coña. No era necesario buscar una entrada del diccionario mujer - español, es que eso
es para una mujer un Ferrari F50.
Visto el resultado, mejor poner los pies en el suelo y olvidarnos de coches con extras fuera de lo
normal.
Lo primero es la seguridad, así que:
1.- hay que tener en cuenta que sea seguro para los ocupantes:
2.- Hay que tener en cuenta que sea seguro para los que están fuera del coche.
3.- Hay que tener en cuenta que lo va a conducir mi mujer.
Este tema del coche me está crispando cada vez más.
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